En Vecinos celebramos un año de gobierno municipal. Un año en el que gobernando en minoría hemos puesto orden en gran parte de los asuntos de nuestro pueblo:
- hemos saneado nuestra situación económica de cara al futuro, empezando por la enorme deuda de Sumtosa, lo que nos permitirá poner a disposición de los más necesitados 12 viviendas de alquiler protegido
- hemos renegociado un buen número de contratos para ahorrar y mejorar los servicios, como lo demuestra la situación actual de la recogida de basuras
- hemos iniciado con las urbanizaciones los procesos para su recepción
- hemos llegado a acuerdos para convertir el ansiado túnel bajo la A6 en una realidad
- hemos terminado un aparcamiento enfrente de la estación de RENFE y remodelado las líneas de autobuses
- hemos puesto en marcha un importante plan de inversiones que supondrá desde la construcción de nuestro primer tramo de carril bici y las mejoras del polideportivo, el Instituto Diego Velazquez y el colegio Lourdes hasta la renovación y construcción de un gran número de aceras, pasando por la puesta en marcha del plan de saneamiento de nuestro alcantarillado tanto tiempo abandonado
Y así hasta haber cumplido ocho de nuestros 22 compromisos programáticos y puesto en marcha otros 11. ¡En un año!
En nuestra labor de gobierno estamos convencidos de haber acertado muchas más veces que errado, pero es que eso y no otra cosa es lo que implica la labor de gobernar: tomar decisiones y responsabilizarse de ellas, que es lo que estamos haciendo y a lo que hemos venido. Pero también es verdad que lo estamos haciendo de una manera distinta, como no se había hecho en nuestro pueblo: sustituyendo la ideología por ideas; la lealtad a unos pocos por el interés de la mayoría; los dogmas de fe por la iniciativa; el azar, el devenir y la inconstancia por el esfuerzo, el talento y la honradez; el anquilosamiento por el movimiento; en definitiva, el cambio de timón en busca de los vientos más favorables frente a los que desde hace muchos años han mantenido el timón siempre fijo.
Pero toda esta labor no la hemos hecho solos, hubiera sido imposible. Para conseguirlo ha sido preciso contar con todos: con los trabajadores del Ayuntamiento, los empresarios y los comerciantes, las asociaciones y los grupos políticos, sin cuya colaboración, ayuda y también crítica y fiscalización a la labor de gobierno no hubiera sido posible alcanzar tal éxito en tan poco tiempo. Pero sobre todo con los vecinos y las vecinas de Torrelodones que han impulsado, favorecido cooperado y sostenido un buen número de iniciativas y que son los auténticos protagonistas del cambio que está transformando nuestro pueblo.
Queda mucho por hacer y tres años por delante. Seguro que hemos cometido errores y hemos defraudado a algunos de nuestros votantes, pero podemos asegurar con la mano en el corazón a los habitantes de nuestro pueblo que, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos nos dejamos la piel: cada día, cada hora, cada minuto para hacer de Torrelodones un lugar mejor para vivir.