Vecinos por Torrelodones

Un aplauso gigante desde y para Torrelodones. Eso es lo que que queremos dar desde esta ventana al exterior que es nuestro blog, sumándonos al resto de ventanas y balcones de toda España desde las que se aplaude al personal de los centros sanitarios, que no solo se está dejando la piel en la lucha sin […]

Un aplauso gigante desde y para Torrelodones

Un aplauso gigante desde y para Torrelodones. Eso es lo que que queremos dar desde esta ventana al exterior que es nuestro blog, sumándonos al resto de ventanas y balcones de toda España desde las que se aplaude al personal de los centros sanitarios, que no solo se está dejando la piel en la lucha sin cuartel contra el dichoso virus, sino que son los más expuestos a sufrir el contagio.

Son la ‘última trinchera’ formada por los que se están jugando la vida por proteger la de los demás, desde médicos jefes de servicios hasta el personal de limpieza de todos los centros sanitarios.

Este aplauso colectivo no deja de ser un acto simbólico, pero es un aplauso gigante, tremendamente emotivo, contagioso y necesario, surgido de manera espontánea a través de las redes y que se suma a otras muchas ideas y propuestas que están surgiendo de manera espontánea estos días de confinamiento.

Este aplauso debe hacerse extensivo al resto de personas que en estos momentos difíciles y extraordinarios sostienen la vida dando de sí el 200% de lo que son capaces. Un aplauso al personal de los supermercados, de las tiendas de alimentación, estancos y farmacias, a camioneros, bomberos, agentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado, del Ejército, voluntarios, periodistas y trabajadores de los medios de comunicación, profesionales que prestan atención psicológica por teléfono, entre otros muchos colectivos.

Un aplauso también a los que desde sus puestos de responsabilidad desde diferentes administraciones deben tomar decisiones en cada momento para responder a todas las situaciones y urgencias que se suceden de forma atropellada. Y también un aplauso a la responsabilidad colectiva, a todos los ciudadanos, que son la inmensa mayoría, que con su actitud cívica y solidaria contribuyen a superar esta situación.

No nos olvidamos de todos aquellos que más van a sufrir o están sufriendo las consecuencias de esta crisis, no solo de salud sino económicas o de otra índole y que también necesitan el apoyo y solidaridad.

Remar todos en la misma dirección

 

 

Momentos como el que estamos viviendo requieren calma y responsabilidad y de un profundo ‘acuerdo de paz’, para remar todos en la misma dirección dejando de lado ideologías y diferencias. En este sentido, desde Vecinos por Torrelodones queremos agradecer sinceramente la actitud de colaboración mostrada por casi todos los partidos de Torrelodones. 

Abrazos gigantes

Ahora más que nunca se pone en valor nuestro lema principal ‘Actitud Positiva’, a la que apelamos para dejar de lado, por lo menos de momento, la fácil práctica de la crítica feroz y los reiterados planteamientos negativos. Una situación como esta, de elevadísima alarma social, es un terreno abonado para todo tipo de informaciones, desinformaciones y mensajes negativos. Seamos prudentes, generosos y dejémoslos de lado.

Seguro que se han hecho cosas mal y otras se podían haber hecho mejor, pero ya habrá tiempo de analizar en profundidad cuando hayamos salido de esta situación. Esto no significa resignación sin más, sino todo lo contrario; aceptar significa dejar de obcecarnos en aquello que está fuera de nuestro control y que no podemos cambiar, y centrarnos en todo lo positivo que podamos aportar.

Más ocupados y menos preocupados

 

 

Situaciones como las que estamos viviendo van siempre  acompañadas de un buen aprendizaje. En lugar de mirar la parte que menos nos agrada de la situación, debemos hacer un esfuerzo por encontrarle algún significado o aprendizaje vital. Es un buen momento para parar y reflexionar, para dar lo mejor de nosotros mismos y para mostrar lo que verdaderamente somos.

Conviene dedicarnos a actividades agradables, como escuchar música, leer, ver la televisión o dedicar tiempo a mejorar la comunicación con las personas con las que convivimos. Cuanto más tiempo estemos ocupados, menos tiempo estaremos preocupados.

La crisis sanitaria ha agudizado nuestro instinto altruista, con iniciativas de lo más diversas. Ante la adversidad, el ingenio de la ciudadanía se ha convertido en una eficaz vacuna psicológica para afrontar los difíciles días que se avecinan. ¡Démosle alas a nuestra imaginación!

Por último, por favor, no renunciemos al humor, ese humor tan nuestro y tan necesario como lubricante cerebral, que hasta en las situaciones más dramáticas no alivia y nos salva.

#yomequedoencasa también en Torrelodones

Por los días que vendrán

 

 

Por los días que vendrán

como mensajes

para querernos vivos

para sabernos alguien,

campanas al vuelo

por los días que vendrán.

Ponte la brisa verde

y zapatos de aurora

llena de mar tus pasos

de sonrisas las horas

deja tu pelo al viento

para que el barrio inquiero

corra el rumor que has vuelto

por las calles y el metro

y empiece a amanecer

LUIS PASTOR

 

 

 

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