Rosa Rivet, Concejala de Cultura en Torrelodones: "La cultura es esencial para la cohesión social y el desarrollo personal"

1.- De Bruselas… a Torrelodones. ¿Echas de menos Europa?
Pues la verdad es que en algunos momentos sí, pero sin nostalgia desmesurada. Europa es más que un territorio, es un espíritu. El haber crecido en el corazón de Europa y convivido con muchas culturas ha desarrollado en mí una curiosidad innata por todo tipo de expresión cultural, convencida de que la integración de las diferencias nos hace más fuertes. Ese es el verdadero espíritu europeo  y es lo que hoy, quizás, echo más de menos en el contexto internacional actual, más allá de mis circunstancias familiares particulares.
2.- Como Quinta Teniente de Alcaldesa y Concejala de Cultura, te ha sido encomendada, como dice oficialmente la página del ayuntamiento, “la labor de fomentar, cuidar y maximizar las opciones culturales que el Ayuntamiento pueda llegar a ofrecer y el mantenimiento y enriquecimiento del Archivo Histórico” ahí es nada. ¿Un reto o una carga demasiado pesada?
Un reto, indudablemente. La verdad es que nunca suelo considerar las situaciones que me presenta la vida como cargas porque creo que eso podría condicionarme negativamente. Intento pensar en las nuevas experiencias como retos y, los retos, siempre me han parecido  que nos dan alas.
En este sentido, asumí con mucha energía hace 5 años ya, la tarea de desarrollar la política cultural de Torrelodones, imprimiéndole mi percepción  en línea con la de Vecinos por Torrelodones, de apertura e integración. Objetivamente  la vida cultural de este municipio no tiene nada que ver con aquella que imperaba en 2011. Hoy por hoy es mucho más dinámica, participativa y con una calidad más consolidada.
Desde que llegamos al gobierno, mi intención siempre fue, y sigue siéndolo, crear en Torrelodones  un clima cultural propenso al desarrollo de todas las manifestaciones e inquietudes artísticas  e intelectuales de los vecinos, no sólo en los espacios competencia de la Concejalía – como son las bibliotecas, la escuela municipal de Música y danza, La casa de Cultura, el Teatro o el Archivo histórico –  sino que ese espíritu transcendiera también al ámbito privado. Y lo estamos consiguiendo, con una mayor oferta y participación de todos los agentes culturales en todas las áreas. 
3.- La Casa de la Cultura en Torrelodones fue durante muchos años un lugar “algo cerrado“ a los vecinos, no sólo en programación sino en gestión, símbolo de una forma de entender lo público. Cuanta energía volcada en deshacer esas malas prácticas ¿no?
Bueno,  es cierto que la tarea no ha sido fácil, pero la verdad es que en Vecinos por Torrelodones la participación y la transparencia están en  nuestra esencia.  Cuando llegué, durante meses me dediqué a ‘abrir ventanas’ en sentido propio y figurado.
En sentido propio, porque era indispensable huir del formato ‘cultura-escaparate’, en el que el teatro era única y exclusivamente utilizado por profesionales, ignorando por completo en su programación  la participación de los vecinos a través de asociaciones, compañías aficionadas, centros educativos…
En sentido figurado, también, dejando atrás viejas prácticas clientelistas en la gestión de contratos tanto en programación como en escuelas. Y sí, la verdad es que devolver la Casa de Cultura de Torrelodones a todos nuestros  vecinos nos llevó mucho tiempo y energía.
4.- La oferta cultural de Torrelodones intenta agradar a todos, niños y mayores. ¿Orgullosa de haber encontrado la fórmula?
Jajaja… No sé si hemos encontrado la formula pero desde luego creo que la oferta es atractiva para todos. Es una cultura de todos, con todos y para todos.
Pienso que el público en general debe nutrirse de propuestas variadas en géneros y contenidos pero siempre de máxima calidad. Es importante tener referentes claros y profesionales para forjar el gusto y el criterio.  Además, me parece fundamental suscitar en edades tempranas la curiosidad por las expresiones artísticas, al objeto de formar ciudadanos que integran con naturalidad la cultura en su desarrollo personal. De ahí nuestro trabajo en relación directa con los centros educativos, tanto en artes escénicas como visuales,  enfocado a potenciar las compañías de teatro joven locales, las agrupaciones musicales, las propuestas de arte y filosofía para niños y otras muchas propuestas que se integran en el plan de infancia. El ‘consumo’ de cultura es siempre altamente recomendable, pero más aún en edades tempranas.
Si vuelvo la vista atrás, me sorprende la cantidad de propuestas nuevas desarrolladas  en estos años: más allá del Festival Flamenco, que ya existía, ahora celebramos  anualmente también el Festival Internacional de Magia, el Encuentro de Tango, las Semanas Culturales Internacionales, el Festival Internacional de Danza Contemporánea Gesto, el Ciclo de Grandes Intérpretes, el Festival de Cine de Animación Infantil, los Mrkdrt, la Semana Cultural con los centros educativos, los Club de lectura de la Biblioteca, los Talleres impartidos por grandes profesionales de las artes escénicas o visuales, los ciclos de conferencias sobre música o historia del arte… También son nuevas  un  sinfín de actividades que no se publican en la programación pero que son acciones encauzadas a fomentar la cultura de base: talleres de escritura para adolescentes en centros educativos, representaciones teatrales a puerta cerrada para jóvenes, encuentros con autores, apoyo directo tanto económico como en espacios a las asociaciones culturales  cada día más numerosas y activas en el municipio y apertura del teatro a los vecinos, no sólo en programaciones culturales, sino en colaboración con otras concejalías para actos educativos, participativos o deportivos.
5.- Tú eres una de las responsables de la digitalización del Archivo Histórico de Torrelodones, un proyecto que no ha sido nada fácil. ¿Cuáles han sido las claves para lograrlo?
Siendo una apasionada de la historia, me parecía fundamental poner a disposición de todos  los vecinos los documentos, en algunas casos auténticas joyas, que conforman  la historia de nuestro Torrelodones, que no es más que el cúmulo de las historias particulares de sus vecinos.
Junto al trabajo de la archivera municipal y otros historiadores, hemos venido celebrando en estos años varias conferencias sobre patrimonio documental en la Casa de Cultura  y, con el apoyo del Consejo de cultura, incluso organizamos una gran exposición retrospectiva  “Cuéntame Torrelodones” en 2014, siempre con el objetivo de poner en conocimiento de nuestros vecinos, la historia del municipio, de sus documentos y de su patrimonio.
Ahora hemos dado un paso más en esa dirección, poniendo a disposición de todos, a través de la web municipal, digitalizando muchos documentos y fototeca que hasta la fecha sólo eran consultados en la sede del Archivo Histórico Municipal.
6.- ¿Aprovechan los vecinos de Torrelodones la oferta cultura que tenemos? ¿Es una respuesta a medida del esfuerzo?
En la vida no siempre es oportuno medir las cosas en función del esfuerzo realizado; yo por lo menos no soy capaz porque dejaría de hacer muchas cosas. En estos momentos creo que los vecinos de Torrelodones saben, en su inmensa mayoría, que la oferta cultural es de calidad, diversa  y plural y  que son parte activa de ella. Cada vez se acercan más vecinos y profesionales para proponer colaboraciones y proyectos a desarrollar aquí.  Y como todo en la vida, nos ha llevado un tiempo llegar a este punto pero la respuesta compensa con diferencia el esfuerzo realizado.
7.- La escuela municipal de música y danza Antón Garcia Abril, ¿ ha supuesto un mayor esfuerzo tuyo a la hora de abordar su gestión que la de las Bibliotecas o el Archivo?
Bueno, realmente la gestión de la Escuela (EMMYD) en gran parte se ha centrado en temas de personal más que de contenido puramente cultural. Cuando llegamos existían algunas situaciones irregulares que abordamos rápidamente y que fueron muy bien recibidas por los profesores: consolidamos la jefaturas de danza y de música, hasta ese momento discrecionales, y reorganizamos algunas incompatibilidades existentes en la época anterior. A continuación se abordó, a nivel municipal, la homogenización de las docencias en todas las escuelas, velando también por el interés del vecino, ya fuera usuario o no del servicio; esto acarreó algunas fricciones, quizás exacerbadas por intereses particulares.
Hoy en día creo que esas diferencias están superadas; se han consolidado contratos de profesores  y todos aspiramos a consolidar, de ahora en adelante, la calidad de la EMMYD y su proyección. Este año, la escuela cumple su 25 Aniversario y junto a sus profesores, además del habitual Festival DDMyD (diez días Música y danza que ya existía antes de 2011) se están preparando varios conciertos en abierto, exposiciones y presentaciones para celebrarlo.
8.- Es filosofía de Vecinos por Torrelodones la colaboración, ¿también en Cultura?
Por supuesto, en Cultura como en otras áreas, es fundamental la colaboración. Primero está la colaboración interna, la de la plantilla municipal – indispensable a la hora de implementar todas las propuestas ofertadas -; y luego está la colaboración externa, con los profesionales del mundo de la cultura. Algunos de los Festivales creados en Torrelodones en estos últimos años, como el Festival de Magia o el Ciclo de grandes Intérpretes, son fruto de grandes colaboraciones con vecinos e incluso tienen por director artístico a quienes originalmente  lo plantearon.
9.- Todavía se escucha eso de “no nos hemos enterado” de tal obra o tal concierto ¿Qué falta para que todos sepan cuál es nuestra agenda cultural?
Es cierto que todavía pasa esto y por ello  seguimos trabajando para mejorar los canales de comunicación. Actualmente, el programa de cultura se buzonea mensualmente junto a la revista municipal en todos los hogares de Torrelodones; además, la programación está en la web municipal, en Facebook y Tuitter. Informamos puntualmente a nuestras bases de datos de cultura y de biblioteca. Próximamente contaremos con pantallas que difundan la programación mensual en vídeos. Será un pasito más hacia una mayor difusión.
10.- Imagina que tienes una varita mágica y todo se te concede, ¿qué harías que ahora no puedes hacer?
Convencer a los dirigentes políticos de que la cultura no es ocio, que la cultura es esencial para la cohesión social y el desarrollo personal y que constituye  la mejor “marca” de un país. Empezaría pues, sin lugar a duda, rebajando el IVA cultural.